COMUNICADO

Podéis seguirme ahora en la  www. pippobuonrrotri.com

mi nuevo espacio de los susurros en worpress, donde encontrareis mis versos, mis relatos y algún capitulo de la reciente novela de misterio que acabo de publicar «LA BAUTA DEL ZENDALE» » Susurros del pasado»

Gracias por vuestro tiempo inquieto leyendo mis entradas.

Un saludo.

INVITACIÓN

 

Queridos amigos compañeros y seguidores de ”El Hombre que le Susurra a los Sentimientos” os invita el 1 de Septiembre de 2018, a la inauguración de su nueva residencia, https://www.pippobunorrotri.com, un amplio loft con vistas al mañana disfrutando del presente con nuevos susurros, bailando con palabras, dibujando las sombras de los sueños. Donde la poesía serán gaviotas que vuelan hacia su eternidad y las palabras los silencios de nuestra soledad.

La poesía no tiene espacio, ni lugar, ni tiempo, vuela libre en el ondulado viento, es del tiempo, del lugar y del espacio de quien la lee, haciéndola suya en el instante de su silencio, y luego deja que esta regrese al desierto de su eternidad.

Se bienvenido, deja tus miedos y disfruta como yo disfruto con tus palabras escritas pues ellas representa tus sentimientos y tu libertad, a los que respeto sin criticar. Aunque la crítica sincera ayuda a mejorar.

 

PIPPO BUNORROTRI

HOY SE PUBLICA MI PRIMERA NOVELA

 

NOVELA DE MISTERIO

TITULO GENERICO: LA BAUTA DEL ZENDALE

TITULO ALTERNATIVO: SUSURROS DEL PASADO

AUTOR: PIPPO BUNORROTRI

EDITORIAL: LETRA MINUSCULA

AÑO DE PUBLICACION: 2018

SAGA: SI, TRILOGIA

PAIS: ESPAÑA

FECHA PUBLICACION: 13 DE AGOSTO DE 2018

EN AMAZON, LA CASA DEL LIBRO, CORTE INGLES

NUMERO R.G.P.I.:09/2017/2251

Copyright © 2017 Autor. Todos los derechos reservados

 

https://kdp.amazon.com/es_ES/

https://www.letraminuscula.com

http://www.Pippobunorrotri.com

 

Es una novela estructurada en sucesivos planos cuyo eje central es el destino, alrededor del cual giran todos los sentimientos y pasiones del hombre; el amor, los celos, el odio, el dolor, la pena que mata y la muerte, que llega servida en  bandeja de plata de la venganza.

Un triangulo equilátero donde, el tiempo, el amor, la muerte, son los lados que forman los vértices, de amistad, de odio y de venganza.

El Tiempo es una ilusión estimada-mente persistente, el Amor es el tejido de la vida, y la Muerte confiere valor al tiempo.

 

La vida más o menos tranquila del reconocido arquitecto Nicolás Beltrán, de la noche a la mañana sufre un inesperado golpe, que hace que su mundo se tambalee. Su esposa, con la que había estado hacia veinticuatro horas, aparece muerta, completamente desnuda rodeada de misteriosos enigmas, en la habitación de un prestigioso hotel de Madrid a trescientos kilómetros de su residencia en Valencia. En un primer momento todo apunta de qué se trata de un ritual sexual en el que su marido, Nicolás Beltrán, puede estar implicado, para las autoridades es el principal sospechoso. Pero la realidad es bien distinta.

Tras las primeras setenta y dos horas de desconcierto, de preguntas donde el ¿Por qué? era la única respuesta, Nicolás Beltrán regresa a su residencia en Valencia y allí descubre que su mujer, Letizia, le había mentido desde el primer día que se conocieron hacia ya once años, le había ocultado una verdad que era incluso más dolorosa que la propia muerte, y la mujer que descubre no es la mujer que él creía conocer. En los misterios ocultos de Letizia, Nicolás encuentra la razón de vivir, o mejor dicho la respuesta a su ¿Waht? Y lo que se esconde detrás de las mascaras de sus yo es. Ya que “Las máscaras sirven para inquirir la verdad de nuestros yo es, silenciándolos entre las sombras de nuestros recuerdos”

Nicolás, creía conocer el pasado de su esposa, de hecho no  la conoció cuando ella le llamo pidiendo ayuda, ya que era la esposa de su mejor amigo de la infancia, del que durante mas de veinte años no había querido saber nada de él, debido a las tremendas diferencias que habían tenido cuando eran unos imberbes jóvenes. Cuando Letizia le llamo para que se hiciese cargo del legado que su amigo de la infancia le había dejado, las diferencias del pasado con su amigo se desvanecieron en la espesa niebla del pasado.

Ahora el destino ha traído el pasado al presente para cobrar su deuda, y Nicolás está dispuesto a enfrentarse a ese pasado, pero no para salvar ninguna deuda sino para reclamar lo que es suyo.

Para ello debe regresar al pasado que tenía olvidado, pero este le lleva ventaja ya que durante veinte años ha estado gobernando en la sombra su presente, pero eso el no lo sabe, lo descubrirá en cuanto empiece a caminar por él con las pistas que le han dejado los asesinos de su mujer.

Todo eso tiene un precio que tanto el pasado como el presente deben de pagar

antes de que uno de los dos caiga derrotado en la arena del desierto del tiempo.

 

ESPERO QUE DISFRUTÉIS CON ESTA HISTORIA

Agosto ha llegado y mi traslado se ha alargado algo más de lo esperado y aun tendré que esperar hasta el hasta el 10 de este mes caluroso para estrenar la nueva residencia del hombre que le susurra a los sentimientos, pues he puesto empeño en que sea un lugar agradable para esta nueva etapa de este proyecto que hace un año he empezado. Muchas gracias a todos los que me han seguido hasta ahora y a los nuevos que a pesar de mi ausencia se han ido agregando a este blog de susurros y poesía.

Como he dicho antes ya casi está listo el nuevo sitio Web en el que seguiré mostrándo mi pasión por las letras, por los silencios y los sentimientos de este loco enamorado de la vida y de las palabras que la definen, convirtiendo este espacio de las letras un lugar en que habitamos todos compartiendo sentimientos e ilusiones.

Esta entrada que hoy le dejo es para darles una noticia, que tenía intención de dársela con la inauguración del nuevo espacio, pero debido al imprevisto retraso he decidido comunicárselo hoy ya que la ansiedad, que como carcoma me corroe por dentro, no me deja que espera más tiempo.

Les anuncio que el próximo día 13 de Agosto de 2018, nace mi primer hijo literario, un hijo tremendamente esperado y deseado. Será la primera parte de mi novela “LA BAUTA DEL ZÉNDALE”

Un enorme abrazo a todos por haberme acompañado durante este año y hacer que resultase ser la mejor experiencia de mi vida, pues me ha enseñado a vencer mis miedos y temores, por haber acogido en vuestro mundo de las palabras silenciosas. Y muchas gracias por estar, por seguirme y por vuestros comentarios y visitas. Espero recibirlos a todos el día 10 para agasajarlos como os merecéis.

Os dejo con una corta sinopsis de mi primera aventura literaria.

 

NOVELA DE MISTERIO

TITULO GENERICO: LA BAUTA DEL ZENDALE

TITULO ALTERNATIVO: SUSURROS DEL PASADO

AUTOR: PIPPO BUNORROTRI

EDITORIAL: LETRA MINUSCULA

AÑO DE PUBLICACION: 2018

SAGA: SI, TRILOGIA

PAIS: ESPAÑA

FECHA PUBLICACIÓN: 13 DE AGOSTO DE 2018

EN AMAZON, LA CASA DEL LIBRO, CORTE INGLES

NUMERO R.G.P.I.:09/2017/2251

Copyright © 2017 Autor. Todos los derechos reservados

La vida más o menos tranquila del reconocido arquitecto Nicolás Beltrán de la noche a la mañana sufre un inesperado golpe, que hace que su mundo se tambalee. Su esposa, con la que había estado hacía veinticuatro horas, aparece muerta, completamente desnuda rodeada de misteriosos enigmas, en la habitación de un prestigioso hotel de Madrid, a trescientos kilómetros de su residencia, en Valencia. En un primer momento todo apunta de qué se trata de un ritual sexual en el que su marido, Nicolás Beltrán, puede estar implicado. Para las autoridades es el principal sospechoso. Pero la realidad es bien distinta…

Es una novela estructurada en sucesivos planos cuyo eje central es el destino, alrededor del cual giran todos los sentimientos y pasiones del hombre; el amor, los celos, el odio, el dolor, la pena que mata y la muerte, que llega servida en  bandeja de plata de la venganza.

Un triangulo equilátero donde, el tiempo, el amor, la muerte, son los lados que forman los vértices, de la amistad, del odio y de la venganza.

El Tiempo es una ilusión estimada-mente persistente, el Amor es el tejido de la vida, y la Muerte confiere valor al tiempo.

 

 

Queridos amigos: Por unos días «el hombre que le susurra a los sentimientos» se ausentara de esta ciudad de las palabras-

Hace un año y diez días que a ella llegue, con mis miedos, temores e inquietudes, y alquile un duplex para ver si me adaptaba a esta ciudad de las palabras, y si ella mis inquietudes acogía. A pesar de mis miedos y temores me dio la bienvenida haciéndome sentir un ciudadano mas de esta sorprendente ciudad de las palabras.

Por eso he decidido quedarme para seguir disfrutando de las palabras de sus ciudadanos que cada día me sorprenden, por lo que me he comprado un amplio loft con vistas al futuro para recibir a mis conciudadanos, de esta ciudad de las palabras y los sueños como se merecen.

Así que me pasare un par de días de mudanza adecuando mi nueva residencia para recibir a mis amigos y vecinos que con tanto cariño me han acogido en este año. Las puertas siempre estarán abiertas, como lo han estado las de este duplex, para que os paséis cuando queráis a dejar vuestras guitas y llevaros uno de mis susurros.

Estáis invitados a la inauguración de mi loft con vistas al futuro la invitación personal os llegara en unos días.

Espero seguir disfrutando de vuestra compañía, y gracias a todos por este año de alegrías donde los miedos se han desvanecido y los temores se han ido sin un adiós.

HASTA PRONTO QUERIDOS AMIGOS Y CONCIUDADANOS DE ESTA CIUDAD DE LAS PALABRAS.

Me han nominado al premio The Blogger Recognition Award 2018

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Este mes mi blog El hombre que le susurra a los sentimientos está a punto de cumplir un año de vida, y ayer recibió un regalo inesperado fantástico, y a la vez ilusionante: está nominado a The Blogger Recognition Award, por parte de JESSI PINK.  (https://laesferaquenogiramas.wordpress.com/2018/07/08/me-han-nominado-al-premio-the-blogger-recognition-award-2018/ a quien agradezco con humildad esta nominación y reconocimiento desde lo más profundo del corazón.

 

EL BLOG  EL HOMBRE QUE LE SUSURRA A LOS SENTIMIENTOS

Hace un año sentí la necesidad de dar rienda suelta a mi secreta pasión por escribir lo que siento, por eso nació este blog, antes que él había otros donde escribía sobre los avatares de mi profesión y otros asuntos mundanos escondiendo en sus renglones lo que realmente siento cuando escribo. Por eso decidí un día empezar esta aventura,  para hablar de lo que me callo, desamarrar la faringe y

dejar de estrujar el corazón y hablar conmigo mismo de lo que siento.

Porque par mi escribir es la muda voz de las mascaras de nuestros yo es. Es la pasión de nuestros miedos, de nuestra alegría y de nuestra decepción. Escribir es contar historias de ficción y la historia de la realidad. Escribir es dibujar las sombras de nuestros sentimientos que vagan en la espesa niebla de nuestra vida. Escribir es la que necesita tu día a día. Por eso: Si escribo es porque necesito es porque necesito contar en verso lo que siento y en prosa las historias de mi alocada imaginación que ha rejuvenecido después de más de  medio siglo de experiencias.

Además aquí puedo ser yo mismo sin esconderme tras una máscara, tengo la libertad creativa de contar lo que quiera manejando mi privacidad, sabiendo además que si a alguien no le gusta lo que escribo puede decirlo libremente sin que por ello tenga que sentirme ofendido o tenga que rectificar lo que escribo y digo, nadie me paga un sueldo para decir lo que otros quieren oír, me doy por bien pagado con los 22.813 me gusta de las 44.320 visitas con sus 3.205 comentarios y los 5.998 seguidores, algo que ni en sueños hace apenas un año podía haberme imaginado, lo que he de reconocer que me ha sorprendido ya que mis susurros no creía que fuesen a interesar a tanta gente. A todos vosotros que diariamente de tenéis el reloj de vuestro tiempo para leer los versos de un aprendiz de poeta y las historias de un soñador, os quiero dar mi más sincero agradecimiento y esta nominación que lleva mi nombre no es mia sino vuestra

Esta nominación es un acicate para seguir mejorando y con mayor interés si cabe, pues no debo defraudaros. Os prometo que lo seguiré intentando cada día.

CONSEJOS

No soy de dar consejos ya que cada uno debe aprender de sus propios aciertos y errores, pero a los que se atrevan a ponerse ante el teclado del ordenador para escribir lo que siente y otros esconden tras la máscara del “ya se verá”, que lo hagan sin miedo a lo que puedan decir u opinar, porque de sus opiniones encontrara su propio estilo de contar lo que siente, y deja que tus lectores tomen la decisión de si merece la pena leerte. Publica sin miedo al que dirán y hazlo hoy sin esperar a mañana.

 

REGLAS

1.- Publicar un agradecimiento al blog que te ha nominado e insertar un enlace a su blog.

2.- Escribir un post para dar a conocer el reconocimiento recibido.

3.- Contar el nacimiento del blog propio.

4.- Dar consejos a los nuevos bloggers.

5.- Nominar a 15 blogueros.

6.- Comentar sobre el blog que te ha nominado y proveerle un enlace a su blog.

 

 

MIS NOMINADOS

 

1.- UNIVERSO EN EL ESPEJO

2.- PLUMA Y LUZ

3.- MARTA CATALA

4.- VIK050

5.- MARIA JOSE LUQUE

6.- BLUEBERRY

7.- AM. AN

8.- ANA CENTELLAS

9.- KOBO 73

10.- MARIA MIGUEZ

11.- LUCESYSOMBRAS

12.- BOTELLASCONMENSAJES

13.- ARACELI GARCIA MARTIN

14.- RIMASFLOTANTES

15.- JM. JORGE

 

Tener la libertad de publicar historias fantásticas y reales es gracias a lectores como ustedes y principalmente JESSI PINK.  Quien ha nominado a El hombre que susurra a los sentimientos. Les invito que visiten su blog (https://laesferaquenogiramas.wordpress.com/2018/07/08/me-han-nominado-al-premio-the-blogger-recognition-award-2018/ donde cada entrada es un regalo de sus emociones, te permite  llorar si te gana el sentimiento o gritar si la euforia te invade. Visita su blog y disfrútalo.

Gracias por haberte pasado por este rincón de los susurros.

Pippo Bunorrotri

ESCRIBIR

Se dice, se comenta por ahí, en los cenáculos de forma poligonal que para mirar al interior de uno hay que hacerlo a través del cristal, de los nuevos eruditos del siglo XXI; que la escritura no es más que un ejercicio de soledad.

Lo cual no es para nada una idea novedosa o nueva, pues hace más de mil años que un poeta a si la describió.

“Mi soledad y yo

Yo y mi soledad

En medio de nada

Ni tan siquiera la mar…”

La Escritura, para mí, es un autentico ejercicio de reflexión, de descubrimiento de mi mismo, de libre creatividad, de impulsos, de sentimientos, de vivencias vividas o inventadas, es un ejercicio de libertad, de mi libertad.

Se dice que la soledad del escritor es un acto de amor,- yo más bien creo que es un acto de reflexión y de autocrítica de alguna forma, de autocrítica de la sociedad en que vivimos,- en la soledad de uno mismo se crece en la alegría, en el dolor, en el desencanto, en la esperanza, en la ilusión.

En la soledad se curan las heridas recordamos nuestras batallas las ganadas y las perdidas, en la soledad recreamos vida, vivida y ajena convirtiéndola en una nueva vida no se si más justa o injusta pero una vida al fin y acabo.

En la soledad nunca estas solo, siempre estas acompañado y conversas con el, con el amigo perdido, con el amigo que acaba de llegar a tu vida, con los que has vivido y te han dejado su huella, con los amores perdidos y los hallados en tu camino, con el desconocido que se acerca a pedirte la hora, con tu dios ese gran desconocido y que un dia te acordaste de el por cualquier motivo.

El fin en la soledad, es siempre estar en compañía.

«Como en la escritura

Como con la lectura

Como conmigo

Como contigo…»

Se dicen tantas cosas de la soledad que cada soledad es diferente. Lo mismo que de la escritura y del que escribe

UNA NOCHE DE PANICO

¡Por fin!. Tras tres  semanas  agotadoras  y  estresantes  de trabajo  en  el  estudio,  había podido  escaparme  de  la  agobiante  urbe  de  Madrid  para  descansar  en el viejo pazo familiar, una antigua construcción del siglo XV que siempre había pertenecido a mi familia y  que yo había  heredado  de  mis padres, no tengo muy claro lo que hacer con ella solo lo utilizo como refugio para escapar de la ajetreado día a día. Y aquí estoy frente a la antigua verja de hierro forjado del viejo palacete, salgo del coche y empujo los dos lados de la verja abriéndola de par en par y durante un instante me quedo observando lo que tengo delante de mí y narrándomelo para mí en el silencio de aquel atardecer,  los recuerdos que aquella vista traían a mi mente.

Frente a la entrada principal del pazo había un inmenso jardín que colindaba muy verde con un bosque de flores y pinos. No muy lejos de allí, del otro lado del bosque, había una alberca recién construida que, cuando estábamos libres de prisas y castigos y el fresco amainaba, esperaba limpísima para bañarnos y divertirnos. Recuerdo que dos días después de un ataque de asma brutal un día de sol radiante y alegre, no pude siquiera tocar el borde húmedo de la reluciente piscina. Siempre pensé que moriría a causa de uno de esos embates mortales que asfixiaban mi existencia cada vez que intentaba algún ejercicio físico o la ansiedad me envolvía, pero bastaban sus dulces palabras y unos suaves masajes alrededor de mi ombligo para que mama devolviera a mi alma la paz y el sosiego que había perdido. Este es el ultimo recuerdo que tengo de mi madre unos días antes de su desaparición y desde entonces no he vuelto a tener esos terribles ataques de asma.

Aquí  estoy,  es  de noche,  y  me  encuentro  sentado  en  mi  butaca  de  orejas  preferido, herencia  del  abuelo,  en la  biblioteca  del pazo mirando  atreves  del  ventanal  el  sauce  llorón  que  crecía  en  el inmenso  jardín que rodea a la vieja casona de piedra, también  cuidado  y  mimado  por  Susi,  mi  adorable  Tata. El pazo no  sería  lo  que  es  si  no fuese  por  ella  y  por  Fermín y Juana  el  matrimonio  guardes  que  ayudan  en  el  día  a  día   a  la  quisquillosa y  a  la vez  adorable  Susi. Ella que había cuidado de tres generaciones de Vega-Rodrigo de Bunorroti, mi abuelo mi madre y a mí, ella que siempre había sido mi compañera de juegos de chiquillo y nunca fue tratada ni vista en la casa como una criada, incluso reemplazo a mi madre tras su misteriosa y repentina desaparición de nuestras vidas

Yo seguí ensimismado observando con fascinación al sauce llorón; si se miraba con cuidado, como cuando miro a Carmen subiendo por el sendero que da al jardín en una mañana de primavera, se podía ver como de sus imponentes ramas caídas hacia el suelo desprendían destellos de luz multicolor que la luna reflejaba  en las ramas del sauce y el viento de aquel día de invierno zarandeaban de un lado para otro, me parecía que fuese como rayos de sol inundando cada rincón de la biblioteca… la musiquilla de mi ipad me saco de mi ensimismamiento.

– Si Beatriz dígame. – era mi secretaria

-Don Nicolas, el proyecto ya se ha entregó al Señores  Puga, quieren concertar una cita para el martes a la una.

-Mire  la agenda y dígame que tengo para el martes.

-El martes a primera hora en la Notaria y a las once tiene una reunión en el ayuntamiento con el concejal. Por la mañana no tiene nada más

-Beatriz llámelos usted y dígales que si les viene bien a la una y media en mi despacho. Envíeme un correo para confirmarlo, ya que tendré el teléfono desconectado. Algo más…

-No, no señor

-Buen fin de semana Beatriz. Dije apagando el teléfono y des-conectándolo, no quería que nadie me molestase

Encendí  la luz que tenia sobre la mesita al lado de la butaca, estire mis piernas colocándoles sobre el banquillo que tenia a los pies de la butaca y me dispuse a leer un exótico libro que a mi mente traía gratos recuerdos de mi infancia, pues hacía tiempo que había encontrado en sus líneas una inestimable compañía para mis ratos libres. Los libros en general siempre me han hecho una muy buena compañía en mis momentos de asueto, pero este en especial cada vez que lo leía me trasladaba a otro lugar a otro tiempo que hacía que me sintiese distinto. Abstraído leía palabra por palabra, pagina por página…en esos momentos la magia del libro hacia que no existiese el mundo a mí alrededor.

Sin embargo, el idílico momento en el que estaba sumiso fue interrumpido por un extraño ruido que provenía del exterior de la casa. No le di demasiada importancia, pues se acercaba una gran tormenta, según me había dicho Fermín cuando llegue a mis dominios, y el viento seguramente había tirado algo, pensé en ese momento en que salí de mi abstracción y continúe leyendo no dándole importancia.

Pasaron unos minutos y no había conseguido concéntrame  de nuevo en mi lectura.

El sonido del viento que penetraba atreves del ventanal siempre me había llamado la atención sobre todo cuando estaba en esta casona y hoy no era excepción. Yo creo que ese sonido que es como le sonido de la voz de las almas en pena, como dicen los lugareños de este rincón de Galicia, que gritan para que sean liberados de su pena y agonía.

Pero en ese instante otro extraño ruido se sobrepuso al agudo silbido del viento, entonces en mi mente comenzó a tejer  una serie de paranoias sospechosas mi cerebro me está diciendo que hay alguien merodeando por  el exterior de la casa queriendo entrar como cuando era niño  y entraron aquellos hombres para llevarse a mi abuelo y el viejo Manuel escopeta en mano los amedranto y salieron corriendo. Solo de pensar en ello se me ponen los pelos del bello de punta. Aun hoy después de tanto tiempo mi cuerpo se sacude cuando pienso en ello, recuerdo que cuando era niño en las noches de invierno el sonido del viento hacia que me acurrucase bajo las mantas de mi cama porque creía que venía al quien a llevarme y gritaba llamando a Susi y ella llega apresuradamente y me acurrucaba entre sus brazos.

En estos momentos mis miedos infantiles al viento la oscuridad los ruidos inesperados se estaban adueñando de mí, levantando de la butaca a la vez que digo:

-Fermín, Juana,  Fermín

Fermín y Juana entran apresuradamente en la biblioteca

-Que desea el señor- pregunta Juana

-No pierdan ni un minuto, miren que todas las ventanas y puertas estén perfectamente cerradas.

-Esta todo cerrado. –Contesto Fermín

-Vuelvan a comprobarlo, me ha parecido escuchar ruidos extraños fuera de la casa

-Ya estas con tus paranoias Nicolás –dijo Susi detrás de Fermín y Juana– ya eres mayorcito para que continúes con estas tonterías infantiles, te voy hacer una Tila para calmar tus nervios

-Hale vosotros ir a comprobar lo que dice el señor

Dándose la vuelta salieron de la estancia dejándome solo, mientras oía a Susi hablar en voz baja mientras se iba hacia la cocina.

Encendí todas las luces de la biblioteca y dirigiéndome al ventanal observé a través del mismo por si veía a alguien allí fuera coloque las manos sobre mi cara y las apoye en el cristal escudriñando la oscuridad del jardín, no veía nada, me aparte de la ventana y observo las pastas del libro sobre la mesa auxiliar alargando el brazo para cogerlo pero no lo hago y me dirijo hacia la mesa del escritorio para coger mi pipa cojo el tabaco, pienso mientras me la preparo que me ayudara a relajarme, la enciendo con dos largas caladas para que vaya tirando.

No dejo de moverme con la pipa en la boca, estoy ansioso y alterado, necesito tener noticias de mis sirvientes.

De repente se fue la luz y los rincones de la biblioteca antes iluminados con la luz de la lámpara de pie quedaron en penumbra. Tanteando en la oscuridad, halle varios candelabros con velas que Susi tenía por toda la casa como esperando a ocasiones como esta, antiguamente recuerdo si era casi diariamente que ocurriese. Las encendí, de mucho no servían puesto que la habitación era muy espaciosa y no llegaba la luz a iluminarla.

Según iba pasando el tiempo mis nervios se fueron calmando, aunque oía el tic tac del reloj de pared que se encontraba en living de la entrada algo y no sé muy bien porque me calma.

Finalmente ya más tranquilo pude sentarme en el sillón a la espera de las noticias que me trajesen cualquiera de los sirvientes que se encontraban en la casa, intento continuar con la lectura pero no logro concentrarme con lo cual cerré el libro por la pagina en la que estaba.Trataba de que los ruidos no dominasen mis miedos y mis nervios, con lo que dirija mis ojos buscando un punto determinado hasta que finalmente lo encontré y fije mi mirada en el centro de la flamante llama de la vela que está situada sobre el zaguán de la ventana.

Por un instante creía que todo era un sueño, me sentía transportado, fuera de mi cuerpo, estaba como en éxtasis; me encontraba en una extraordinaria e ininterrumplible paz interior. Pero el vaivén de una puerta habiendo y cerrándose  me hizo salir de mi éxtasis momentáneo. Provenían de una puerta exterior de la casa que daba al sótano y que yo personalmente me había encargado de cerrar con llave ¿Cómo es posible que el viento la había abierto?

Sin darme cuenta, me encontraba frente a la puerta del sótano que yo había cerrado esta misma tarde la puerta se estaba agitando violentamente contra el alfeizar de piedra de la misma.

Sujete el pomo de la puerta y antes de cerrarla definitivamente, observe desde el exterior de la misma el profundo y oscuro sótano; los relámpagos que en ese momento se estaban produciendo iluminaban hasta el fondo del mismo, el efecto de los mismos y desde la entrada misma producían una perspectiva que parecía que se hubiesen abierto las puertas del infierno.

Las gotas de lluvia corran por mi rostro adentrándose entre la camisa recorriendo mi cuerpo empapándome. El viento los truenos y los relámpagos unidos a los portazos de las contra-ventanas me están desconcertando. Con un movimiento brusco cierro la maldita portezuelo del sótano que me había traído hasta donde me encuentro ahora maldiciendo

– Maldito tiempo, joder con la puertecita de los cojones contra que está tropezando ahora

Me agacho y con la mano retiro el trozo de madera que no me deja cerrar la puerta y tiro de ella con la otra cerrando la puerta.Cae un relámpago iluminándome y observó que mi mano se encuentra chorreando un liquido rojo, bajo la vista desconcertado y me encuentro bajo mis pies un charco de agua y lodo teñido de rojo me agacho para tocar lo que aquello era a la vez que miraba para descubrir de donde venia aquello que parecía sangre era sangre, dando un salto hacia tras perdiendo el equilibrio y quedando sentado en el charco de agua y lodo, aterrado me levante y corro como enloquecido hacia la entrada de la casa dando un traspiés entro en casa rápidamente y cierro la puerta al mismo tiempo que le doy dos vueltas a la vieja llave.

Tiritando y empapado hasta el tuétano como estoy me dirijo al baño que se encuentra en el hall de la entrada al lado de la entrada a la cocina, cojo la toalla que se encontraba sobre la cesta de mimbre que Susi había colocado y mientras me seco pienso y me pregunto: < ¿Quién había abierto la portezuela del sotano?, ¿De quien era la sangre de la entrada al sótano?, ¿Seria sangre o pintura? Termino de secarme y subiendo la escalera me dirijo a mi habitación, cojo una camiseta del armario y los viejos vaqueros raidos que uso cuando salgo a pasear por el jardín mientras me cambio por la vergüenza que yo siento de mi mismo, armado de un coraje, descontrolado por la vergüenza, tomo el candelabro grande que se encuentra en el mueble de la entrada saco el mechero y termino de encender las velas que estaban apagadas, me dirijo a la portezuela  de acceso al sótano, que se encuentra debajo de la escalera de piedra, agarre con decisión el pomo de la portezuela y lentamente abrí la pequeña portezuela que conducía al sótano.

– ¡Fermín ¡¡Fermín! llame.  Nadie me contesto. Estarán cerrando las contras porque con este temporal el viento terminara por mandarlas al carajo. Pensaba.

Comienzo a bajar la escalera de madera.

– ¡Joder! ¿Quién anda ahí? Dije en alto

Nadie contesto, y me doy cuenta que era el ruido que producen las escaleras de madera bajo mi peso y mi propia sobra reflejada la que me habían hecho imaginar que había alguien allí abajo.

Llego al final de  la escalera y camino sobre el suelo de piedra y tierra del viejo sótano siento como mis zapatillas se empapan de agua.

– ¡Joder! todo el suelo está lleno de agua de la lluvia.

Muevo el brazo dirigiendo la luz hacia todos los rincones intentando encontrar algo, solo veo las viejas estanterías de madera repletos de las cosas de mi madre de  libros y legajos de la familia y que mi padre

había ordenado a Susi que los guardase en esta parte del sótano, mientras decidiese que hacer con ellos, nunca llego a decidirse y allí se encontraban todavía <jolines un día de estos tengo que ponerme a inventariar todo esto y ver que hago con ello>pienso mientras sigo moviendo el brazo con el candelabro buscando no se qué. Todo está muy sombrío, entorno los ojos para agudizar la vista para descubrir el menor movimiento, estoy en continua alerta.

Seguí moviéndome por el sótano sin importarme la humedad de mis pies, hace mucho tiempo que no visito esta parte del sótano; observo las estanterías llenas de legajos, libros y diversos objetos, viendo todo aquello con la tenue luz del candelabro a mi mente vienen recuerdos lejanos cuando este lugar, fue apartado del resto del sótano y cerrado con llave por mi padre, este lugar me estaba prohibido ahora my imaginación del niño curioso que había sido me está llevando a pensar en aquellas sorprendes historias que me inventaba y le contaba con insistencia a la tata Susi y ella como respuesta me mostraba su sonrisa.

Estoy absorto en mis recuerdo cuando de repente oigo unos extraños ruidos hacia mi derecha y giro mi mano con la luz enfocando de donde venían esos extraños ruidos, no veo nada pero un ruido agudizo el oído y puedo distingo el ruido que se está produciendo; parece que son como pezuñas de un caballo golpeando enérgicamente sobre el suelo y de una cadena se arrastrase por el suelo al mismo tiempo que el ruido agudo de las pezuñas. El piso de madera cruje cada vez más fuerte, y estos ruidos se están acercando a mí, sigo moviendo la luz escudriñando con mi vista hacia donde salen los ruidos pero no logro ver nada de nada. Mi corazón se acelera, siento como late fuertemente, gotas de sudor recorren mi cara, a mi mente acude el recuerdo olvidado de lo que me contaba el viejo guardes Ramiro de lo que había en esta parte del sótano al que se me tenía prohibido la entrada y hasta el preguntar a la gente de la casa, ese recuerdo me está paralizando de terror. Este miedo aterrador que siento me hace recordar los momentos importantes de mi vida, mi infancia con mi madre, mi infancia sin mi madre, cuando mi madre desapareció, mi primera comunión, mi boda, mi separación, mis hijos, mi trabajo, en Mari, en Dios. Un grito de Susi llamándome desde arriba.

-¡Señor, Señor! Venga rápido, por favor corra ¡Señor, Señor!

-Ya voy, Susi.-grite

Girando bruscamente, apresurándome hacia la escalera, subí corriendo la escalera…

-¡Hay! ¡Mierda puta! – grite

La tabla del peldaño cedió bajo mi peso quedando mi pierna atrapada.

Intento sacarla y no soy capaz, poso el candelabro el peldaño superior y con las dos manos intento sacar mi pierna del maldito peldaño de madera, pero nada no puedo liberarme, mi corazón late con fuerza, me desespero, los ruidos extraños cada vez se acercan mas me aterroriza y la desesperación va en aumento, giro la cabeza hacia donde provienen los ruido y la vuelvo mirando hacia la puerta de entrada al sótano deslumbro una silueta y grito.

-¡Susi, Juana, Fermin! estoy aquí abajo atrapado

Susi aparece en lo alto de la escalera bajando hacia mí.

-¡Hay Señor, Señor! que le ha pasado. ¡Hay! niño Leo como se te ocurre bajar solo al sótano

Cogiendo el candelabro y lo coloca en el rellano de la escalera, baja hasta donde me encuentro y me agarra por debajo de los brazos tirando de mi hacia arriba ayudándome a liberarme del agujero de la escalera. Mecánicamente tomo la decisión de averiguar de dónde procedía aquella sangre, porque estoy convencido de que es sangre, termino de vestirme y salgo de la habitación y bajo las escaleras y con un sabor amargo en mi boca, no sé si por el miedo o

-Espera Susi, deja ya de rezongar y ponte detrás de mí y sujéteme  mientras intento yo liberar un poco la pierna y así después me podrá ayudar mejor.

Susi se coloca detrás de mí en el peldaño inferior

-Susi, ya estas preparada

No obtengo respuesta y giro la cabeza para ver qué es lo que está haciendo, miro su rostro y descubro en él una sensación de pánico, está completamente blanca inexplicablemente pálida parece que está viendo la cara de la muerte al mismo tiempo que grito

-¡Que es eso!

Giro la cabeza y agarro con fuerza mi pierna atrapada tirando hacia arriba de ella consiguiendo liberarla, con el impulso Susi pierde el equilibrio cayendo sobre el suelo del sótano. Me pongo de pie y observo a Susi sobre el suelo, bajo los tres peldaños que nos separan esta pálida y descompuesta no deja de apartar los ojos de donde procede el ruido, la cojo en bazos y con la pierna dolorida subo como un poseso las escaleras de dos en dos con Susi en mis brazos. Al llegar al living, dejo a susi  sobre la silla y aseguro la portezuela del sótano con la barra de hierro y le doy una vuelta de llave. Escucho llegar apresura mente a Fermín y a Juana gritando y descompuestos. Fermín dice:

-Señor, escuchamos los gritos, ¡¿Qué ocurre?!

-¡Hay algo ahí abajo…en el sótano de…! Susi lo ha visto, ¿Susi qué era eso?- dije casi sin aliento girándome.

Fermín y Juana me miraban con los ojos abiertos, un largo silencio corta el aire del ambiente, mire a Fermín  y a Juana incrédulo como buscando una respuesta que no encontré solo sus rostros desconcertados; Susi mi Tata no estaba allí sentada donde yo la había dejado.

-Rápido  Fermín busquemos a Susi, Juana usted vaya a la cocina, no puede estar muy lejos después de la caída apenas podía moverse – dije

Fermín  y yo nos dirigimos hacia  el vestíbulo principal y la biblioteca…….

-¡Señor Leo, Señor! Dijo Juana desde la entrada de la cocina

 Nos giramos y nos dirigimos hacia donde se encontraba Guaniquí era la entrada de la cocina

-He oído gemidos dentro de la cocina Señor  Leo.

Juana  se aparto de la entrada de la cocina y asustada tomo la mano de su marido Fermín. Yo les mire y entre en la cocina, pegados a mi espalda estaban  mis asustados criados, aunque yo en mi interior esta aterrorizado, desde la puerta vimos tirad en el suelo al lado del fregadero frente al ventanal de la cocina a mi Tata Susi, apresuradamente nos abalanzamos sobre ella los tres, la levantamos y la pusimos en su sillón de mimbre que ella tenía en la cocina; Susi hablaba en voz baja, apenas se le escucha y lo que dice no tiene sentido.

-¡Ah! Era  un mostro…feo…pelos…, venia hacia mi…. Venía a buscar… me….su cara.-dijo agitándose y con los ojos fuera de sus orbitas

-Susi ¿Qué has visto? – le pregunto

-¡Susi, Susi! ¿Qué te pasa?

La sujeto por los hombros y la zarandeo, abre los ojos murmurando algo que no logro entender, los cierra a la vez que vuelvo a zarandearla para haber si reacciona. Le suelto los hombros he intento tomarle el pulso, no logro encontraselo, un hilillo de sangre está empezando a brotar en la comisura de sus labios.

-Juana, valla al teléfono y llame a Don Anselmo el médico, y dígale que se acerque que Susi se ha desmallado.

No he terminado la frase y veo salir a Juana de la cocina corriendo. Me giro y veo a Fermín con los ojos abiertos como platos mirando fijamente a Susi

–  Fermín – le cojo del brazo moviéndoselo – encienda todas las velas de la casa, y traiga unas linternas. Me ha oído Fermín

–  Si Nicolás, ¡oh perdón! señor, velas…si, si, si velas

A la vez que se encamina hacia el cuarto de la cocina donde se guardan las cosas de la casa.

Entra Juana toda apresurada y casi sin aliento en la cocina diciendo.

–  ¡Señor, Señor! el teléfono no funciona, debe estar cortado…-mirando el cuerpo inmóvil de la Tata – ¿la señora Asunción está muerta?

–  Que tonterías está usted diciendo Juana, ¿Quién es Asunción?

–  Señor Nicolás pero no sabe….

–  ¡Ya, ya, ya! Ya se Juana, ya sé quién es Asunción – no dejándola terminar.

Ya no me acordaba del verdadero nombre de mi querida Tata Susi, como nunca le había llamado así, bueno recuerdo que cuando era pequeño y me reñía, yo la llamaba Asunción para hacerla rabiar.

–  Juana deme el número de teléfono de Don Anselmo. ¿Lo sabe?

Un alarido agudo y profundo, nada parecido al de un ser humano, irrumpió en el silencio mortal de la noche; ni siquiera el eco se atrevió a repetirlo. Además, se podía oír que la portezuela que daba al sótano era golpeada desde atrás. Comenzando a temblar como si de un terremoto se tratara.

-¡Vámonos ya mismo! Subamos al coche -dije casi gritando gritando.

Salimos los tres de la casa corriendo, llegamos al coche. Intenté encenderlo, pero no podía, el nerviosismo no me dejaba. Después de algunos intentos, encendió, y salimos de la finca, no sin antes ver el interior de la casa por una de las ventanas.

La terrible lluvia me impedía ver el camino y el ímpetu del viento desviaba el auto. De pronto el coche se detuvo, atónitos nos miramos mutuamente. Hacia la izquierda del camino se lograba ver una gran estructura, seguramente era esa antigua casona abandonada 

– No hay más combustible – dije inquieto.

Decidimos quedarnos dentro del coche por un tiempo, pero la lluvia e el viento la no se calmaban; además, el coche se agitaba tanto que comenzamos a pensar que lo mejor seria refugiarse en esa vieja casona abandonada. Salimos del coche, y corrimos hacia el pórtico de entrada… la puerta estaba abierta, seguramente el viento la había abierto. 

Llegamos a una habitación inmensa, llena de polvo y telarañas por todos los rincones. Sólo yo subí las grandes escaleras mármol blanco tamizadas por un espeso polvo; Fermín y Juana se quedaron en el vestíbulo. Los muros de la casona eran tan gruesos que apenas si se escuchaban los truenos.
Llegué a un corredor, una de las puertas estaba abierta y decidí entrar. Era una habitación rústica y muy amplia, pero lo que más me extrañó fue que había un farol encendido sobre el aparador de la entrada, me aproximé a una de las ventanas y  deje que mi mirada se perdiera en el nebuloso horizonte. Desde allí la tormenta se veía terrorífica, un rayo tras otro iluminaban las espesas nubes que no dejaban de moverse como un remolino. En medio de ese temporal logré ver el coche, el cual tenía las luces prendidas, aunque no recordaba haberlas dejado encendidas. Al girarme para salir de la habitación me sorprendió ver un viejo baúl abierto, pero más aún que el propio baúl me sorprendo que del mismo fluía un liquido viscoso color rojo. La piel se me erizó, nuevamente una imagen del pasado, de la sangre enlodada, se hizo patente en mi mente. Bajé las escaleras corriendo, y le dije a Juana:

– ¡Está aquí! Viene a hacia nosotros… salió del baúl. ¡Nos quiere matar!.

– Fermín –grité. 

Él cayó al suelo y, como a Susi, de su boca brota una espesa sangre.

Juana y yo quedamos paralizados unos segundos; lo que sucedía era increíble.

– ¿Qué está pasando señor?

– Está muerto,  y lo estaremos nosotros también si no hacemos algo pronto. -dije.

– ¿Pero qué es? ¿Qué ocurre? Patrón, no sé qué hacer. Dígamelo usted.

– Creo que sé lo que es. El pasado nos persigue.

Juana queda pálida como un folio al mirar la puerta 

– ¡Esto es imposible! Es imposible… – gritó agitada.

-¡Qué Juana! ¿Qué es lo imposible? -dije con temor.

Pero en ese momento ella cayo arrodillada sobre el piso.

Giré lentamente para mirar por la puerta y observé lo que tanto había ansiado ver, lo que me tenía atormentado durante el pasado y ahora se materializaba, lo que sin explicación había matado a Susi y a Fermín; lo que en una palabra me mataría a mi también.

AMAR

 

Amar, amor, es que a pesar del tiempo el sentimiento siga encendido en la sangre que recorre tus venas, es no dejar de pensar que el futuro que nos viene esta lleno de luz, y mantener viva la esperanza y la ilusión de que ese momento especial no tardará en llegar, es que no obstante las heridas causadas en nuestro pasado no son mas que heridas que entre los dos iremos curando sin rencor y con perdon,  sin reproches y olvidándolo todo. Y de nuevo entre los brazos de uno y otro volver hacer que renazca el amor.

RECUERDOS

Recorro las sendas de tu pasado por el camino de nuestro presente. Recorro el valle de tus anécdotas con el remanso de tus dulzuras, con las caricias de tus dedos, mientras recuerdo el cariño de tus palabras, recuerdo el  sonoro sonido de tu voz, recorriendo la caracola de mis oídos que con dulzura impactan en el timpano para que sus ondas concéntricas bañen mi conciencia.

En la brisa mañanera del día a día, me veo como si estuviera dentro de un lago de cálidas aguas cristalinas y me doy cuenta… ¡que te extraño!

Pienso en todo lo que dejas en mí día a día, cuando estas a mi lado, en aquello que no te dejo ver, en eso que no te digo cuando te miro, y que tu adivinas en mi mirada, en aquello que oculto tras las bromas, en lo que digo y no quiero decir, en lo que quiero decir y no digo, en las verdades a medias para no tener que mentir.

Solo así pasa el tiempo eterno en los días de mustio alejamiento.

Me miras… Te miro…

Una sonrisa cómplice se dibuja en nuestros labios mientras nos miramos.

Y todo queda en simples ilusiones, como si me escribieras un cuento de ti para mí… Como si estuviésemos atrapados en una lámpara mágica de cerámica china para bailar pegados en su bóveda de cristal…

En todos mis instantes de soledad pienso en ti…

Aunque no te vea, aunque no estés, tus fotografías en el interior de mi cerebro revolotean como mariposas alrededor de una flor.

Cada minuto de una hora es una situación candente que me aísla de la realidad y me conecta con tu pensamiento.

Pienso en ti constantemente, aunque no me creas, aunque digas que no es cierto, aunque pienses que te miento.

He aprendido a verte de lejos y contemplarte cerca de mí… Sin poder abrazarte… ¡No te miento!

Solo se que te quiero, por eso estoy ausente de ti, sin estarlo, y me pierdo en el silencio de tus palabras, descubriendo  en ellas, algo entorpecido por las horas perdidas, en que no nos hablamos, en que no nos vemos. Que tu eres mi angel, mi luz, la mariposa que recoge mi polen, que me refresca con sus alas revoloteando sobre mi rostro.

¿Sabes? En la rutina de mi día a día he pensado en ti…

He visto como mis ilusiones acarician con ternura tu suave piel melocotón.

Hasta he sentido que me llamas cuando en un salón me encuentro, el sonido de tu voz resonando entre sus paredes es la sinfonía de una música que hace énfasis en mi conciencia hundiéndose en la mística de la poesía, solo para verte volar entre las nubes llevándote mi corazón entre tus alas.

No sé lo que llevas dentro… Un misterio vehemente…

Solo me pierdo en tus cosas tiernas, en tu preciosa mirada de ojos azulados, en esa sensación de amor frágil o tal vez en un temor que no termino de definir bien.

Quizás solo me equivoco cuando te escribo, tal vez entiendas o veas esto extraño en mí… pero no dices nada… Tu simple silencio es como este loco amor que siento por ti.

Te tengo presente en mí, y lo sabes, cada amanecer, cada mañana, cada tarde, cada atardecer. Te sueño, a veces en mis frustraciones en el léxico de lo profundo, me invade el letargo. El letargo es lo que envuelve al alma para llevarla al mundo de las cosas volátiles. En esos momentos tu recuerdo invade mi conciencia con tu sonrisa.

Te pienso en el cenit del sol… En el esplendor de la noche. Mientras contemplo  el crepúsculo, en el horizonte…

Entiendo lo que es y lo que imagino.

Como cataratas son tus palabras en mí, como las turbulencias en el agua de un río bravo, parece la circulación de nuestra sangre, en ese desbocado torrente llevándose mi corazón que atrapas en tus manos como queriendo estrujarlo sobre tu pecho, sintiendo uno solo latido al mismo tiempo, yo en ti, tú en mí, los dos en uno, solo que separados por nuestros cuerpos.

Déjame entrar en tu mundo medieval, como un caballero andante en su cruzada, para así poder conquistar tu corazón con el mío; déjame que me pierda en la almorahira de tu jardín Ándalus de ese amor tuyo…

Arrúllame entre tus brazos y dormiré en tu regazo como un recién nacido, déjame besar tus labios sonrosados como si fuese la llave para poder penetrar en los rincones de tu universo, déjame sondear tus fragmentos desde adentro y así poder elevarme en tu arco iris hasta el cielo.

Solo déjame empaparme en ti y no me digas que no, ¡por favor!…

Encuentro en ti ese pequeño detalle que me hace feliz…