Llegara el día
en que te liberaras
de la cárcel
de mi corazón
y me convertiré
en esclavo
de la memoria
de tus recuerdos.
La ausencia
se convierte en dolor
y la distancia será
el cirio encendido
de la nostalgia.
En los silencios
hallare esas palabras
de arrepentimiento
que alimentaran
los suspiros
de las noches.
Pippo Bunorrotri.