La dicha tengo de alimentarme con la mirada de mi musa
Algún día mis poemas recordaran nuestros nombres
Más cuando ocurra acógelos en tu pecho, pues son el sentir de la inspiración
Un suspiro de nostalgia puede que arranquen de tu corazón
Son silencios de amor por lo amado con pasión
Amar a alguien se siente y te inspira
Días de besos, abrazos y caricias, donde
Esos momentos de tristeza y amargura se olvidan
Mis poemas son hijos de mi mente soñadora
Ilusiones traen a los fecundos crepúsculos del atardecer
Sin fin ni demora
Palabras vehementes las de mis poemas, que a ti musa te pertenecen
Oda del amor que te mereces
Esculpo en los versos mis luchas, mis empeños y mis sentimientos
Maraña de palabras que intento ordenar
Abrazando la inspiración que tú me dejas
Soy el caballero andante, que lucha con la estrofa, la rima, de su amante.