DEPRESIÓN

Días grises que nublan el alma

Empeñados en una emoción irreal

Poetas la utilizan para crear

Recreando lo que la conciencia inventa

Emoción imaginaria de la soledad, es

Siguiendo el camino de la desolación

Intentando vivir sin dolor, pero sufriendo

Obteniendo las respuestas de la decepción

No calmando ese dolor que te ahoga.

LA SOMBRA DE MI YO

Hubo un tiempo en el pasado

qué perdido estuve

entre las sombras de mi yo,

un tiempo en que llorar no podía

reír de nada serbia,

gritar inútil era,

si nadie escuchaba,

pues muerto estaba en vida.

 

En ese tiempo del pasado

la desgana ocupaba los amaneceres,

la desdicha, la amargura

las noches ocupaban.

 

En ese tiempo del pasado

de desdicha y desgana

cansado estaba de sufrir

sin saber porque vivir,

pues morir…

tampoco solución era,

aunque en ella, mi soledad

acomodo encontraba.

 

En ese tiempo del pasado

de dolor sin dolor,

de sufrir por sufrir,

donde la soledad

era mi amiga,

mi compañera,

en la lucha son las sombras

de mi propio yo

un día entendí y comprendí

la variedad  de sentimientos

que siento; la amistad,

el te quiero, el odio,

y el vete ya.

 

Entonces dije;

¡basta ya de sufrir en soledad!

de llorar sin lagrimas,

de reír sin ganas,

de gritar sin voz,

porque…

llorar alivia,

reír sana,

y gritar tu sentir aflora.

 

Ese día la batalla

con las sombras de mi yo,

gane,

mas en ella perdí

el amor de unos hijos,

el respeto de unos amigos

el tiempo de unas caricias dadas

y no sentidas.

 

Ahora en el duelo

de esa batalla,

ganada y perdida,

quiero olvidar, enterrar

ese tiempo del pasado

pues debo conquistar

lo perdido.